“Lo que vivimos hoy no es casualidad, es la consecuencia directa de años de negligencia, permisividad y abandono. El libertinaje institucional y la indiferencia política abrieron las puertas para que el narco se instalara en el corazón de nuestras comunidades”, señaló Garrido. Con tono crítico, el consejero enfatizó que ya no se trata de hechos aislados: son territorios tomados, niños reclutados y familias destruidas. “No se puede seguir actuando con tibieza frente a un flagelo que mata, que doblega comunidades y que amenaza el futuro del país. En ese sentido, el gobierno y el liderazgo político han dejado desamparado a todo un país entero”, agregó con fuerza. Garrido subrayó que Chile requiere decisión, autoridad y valentía real, no planes de escritorio ni discursos vacíos que nunca llegan a la calle. “Hoy está en juego no solo la seguridad, sino la dignidad y el futuro de todos los chilenos. El país exige firmeza, no excusas”.
“Lo que vivimos hoy no es casualidad, es la consecuencia directa de años de negligencia, permisividad y abandono. El libertinaje institucional y la indiferencia política abrieron las puertas para que el narco se instalara en el corazón de nuestras comunidades”, señaló Garrido. Con tono crítico, el consejero enfatizó que ya no se trata de hechos aislados: son territorios tomados, niños reclutados y familias destruidas. “No se puede seguir actuando con tibieza frente a un flagelo que mata, que doblega comunidades y que amenaza el futuro del país. En ese sentido, el gobierno y el liderazgo político han dejado desamparado a todo un país entero”, agregó con fuerza. Garrido subrayó que Chile requiere decisión, autoridad y valentía real, no planes de escritorio ni discursos vacíos que nunca llegan a la calle. “Hoy está en juego no solo la seguridad, sino la dignidad y el futuro de todos los chilenos. El país exige firmeza, no excusas”.