Investigación por uso indebido de licencias médicas
Más de 25 mil funcionarios están siendo investigados por el uso inapropiado de licencias médicas. Entre los implicados se encuentran varios diputados, incluyendo a Paula Labra, quien habría viajado a Europa durante una semana distrital en la que debía estar en su provincia.
El escándalo de las licencias médicas ha sacudido a todos los ámbitos y poderes del estado, con más de 25 mil funcionarios bajo investigación por el uso indebido de este recurso que permite el reposo terapéutico. Secretarios regionales ministeriales, fiscales, jueces e incluso la renuncia reciente de la superintendenta de seguridad social han acaparado la atención en las últimas semanas.
En un giro inesperado, legisladores como diputados y senadores se han visto envueltos en la controversia al hacer mal uso de permisos especiales para viajar al extranjero con fines recreacionales, es decir, vacaciones. Este comportamiento cuestionable ha puesto en entredicho la ética y responsabilidad de aquellos encargados de representar al pueblo.
Los parlamentarios cuentan con tres mecanismos para ausentarse del Congreso: impedimento grave, permiso sin sueldo y semana distrital. Si bien estas opciones están contempladas en el reglamento del Congreso, su combinación inapropiada para beneficio personal ha generado críticas y cuestionamientos.
Entre los investigados se encuentran figuras destacadas como José Miguel Castro (RN), Carmen Hertz (PC), Diego Ibáñez (FA), Ximena Ossandon (RN) y Guillermo Ramírez (UDI). Sin embargo, destaca el caso de Paula Labra (Ind. RN), diputada del distrito 18, quien habría viajado a Europa durante un periodo crucial para su labor legislativa en el Maule sur.
La facilidad con la que los legisladores pueden viajar al extranjero contrasta con las restricciones que enfrentan los trabajadores comunes. La diferencia abismal entre las dietas parlamentarias y el sueldo mínimo evidencia una brecha que pone en tela de juicio la equidad y transparencia en el ejercicio del cargo.
Más allá de señalar a los congresistas, se cuestiona la falta de supervisión y control interno en el Congreso para evitar abusos como estos. La necesidad de establecer mecanismos más estrictos y transparentes se vuelve imperativa en una democracia cada vez más exigente.
Se espera que en las próximas semanas salgan a la luz más casos de legisladores que aprovechan un sistema diseñado a medida, alejándose del compromiso asumido de legislar en beneficio de todos los ciudadanos chilenos.
