Innovadora tecnología chilena con nanopartículas de cobre evita las infecciones asociadas a dispositivos médicos
La plataforma COPESIL, creada por un equipo interdisciplinario de la Universidad Bernardo O´Higgins, es capaz de liberar iones de cobre, generando un efecto antimicrobiano y antibiopelícula en dispositivos médicos de silicona causantes de infecciones en seres humanos.
El uso de dispositivos médicos es fundamental para el cuidado de la salud de las personas. Sin embargo, el solo uso y manipulación es un problema frecuente que provoca importantes complicaciones para la salud. Prevenir ese escenario y aportar una solución concreta fue el objetivo de un equipo interdisciplinario de la Universidad Bernardo O´Higgins para crear COPESIL, una innovadora tecnología con nanopartículas de cobre que evita la contaminación bacteriana de los dispositivos usados en procedimientos, tratamientos, cirugías y pabellones.
En concreto, la plataforma es capaz de liberar iones de cobre de manera controlada a la superficie, generando un efecto antimicrobiano y antibiopelícula en dispositivos de silicona que pueden ser causantes de infecciones en seres humanos. Asimismo, COPESIL ha demostrado ser de fácil manejo, seguro, bajo costo y no citotóxico, lo que lo posiciona como una excelente alternativa para generar dispositivos médicos y ser usados en clínicas y hospitales. “La generación de dispositivos médicos en base a COPESIL tendrá un impacto transversal, mejorando la calidad de vida de las personas, disminuyendo los indicadores de morbilidad y mortalidad, impulsando la eficiencia en los sistemas sanitarios y contribuyendo de manera real a la salud, con un impacto social y con enfoque de equidad”, destacó la Dra. María Cristina Paredes, Jefa del centro de estudios e investigación en salud y sociedad de la UBO y líder de la iniciativa, añadiendo que se trata de alternativas muy eficientes en términos de costos, lo cual es clave en contextos de escasos recursos donde se dan situaciones como el déficit de tratamientos antibióticos adecuados y oportunos.
Una de las aplicaciones de la propuesta es COPESILCUP, un catéter urinario permanente con propiedades únicas que, utilizando la tecnología de COPESIL, es capaz disminuir o prevenir la formación de biopelícula, reduciendo las infecciones del tracto urinario.
“Las Infecciones Asociadas a la Atención Sanitaria (IAAS) son un importante problema de Salud Pública a nivel global. De hecho, se estima que los costos directos anuales producto de las IAAS fluctúan entre los 34.000 y 74.000 millones de dólares. Además, se han calculado costos sociales adicionales que incluyen pérdidas salariales por incapacidad y muerte prematura, los cuales están entre los 62.000 y los 73.000 millones de dólares”, detalló la Dra. Paredes.
La idea, que se está trabajando desde el 2018, ha implicado una inversión de más de 500 millones de pesos, los cuales han sido obtenidos a partir de distintos fondos públicos adjudicados por el potencial del proyecto. Actualmente, la aplicación en catéteres urinarios se encuentra en su fase clínica, por lo que se espera su validación en el Hospital del Salvador, Instituto Nacional del Tórax, Hospital Geriátrico y el Instituto de Neurocirugía Dr. Alfonso Asenjo. “Una vez validado el dispositivo, se espera entrar al mercado nacional por medio del escalamiento industrial de la tecnología que permita abastecer prioritariamente el área pública de salud”, puntualizó la académica UBO.